martes, 26 de enero de 2010

*****Las extrañas características del mundo en que existimos. (2)

El Sistema Solar ¿Ha sido intervenido?


El Universo en que estamos inmersos es, con mucho, enormemente mas extraño que lo que parece a simple vista. Tiene todas las apariencias de ser un diseño. Un diseño muy inteligente y que, por fuerza, tiene que tener detrás una inteligencia que lo diseñó. Sigue leyes semejantes a un programa de computador, en que el resultado, el producto, es este Universo.
¿Y el programador sería Dios? , es la pregunta....
Es la mejor explicación. La otra, es que el Universo no exista realmente y nosotros, con todo el sistema solar, estemos metidos en una burbuja gigantesca (para nosotros) y esta burbuja no sea otra cosa que una especie de pecera o terrario para una especie inconcebible. Un juguete... Pero aún así, ¿De adonde salieron los constructores del juguete?
......

Una sorprendente coincidencia. Ley de Titius-Bode

La llamada Ley de Titius-Bode expresa de una manera fácil la distancia de los distintos planetas al Sol. La formulación clásica de la Ley de Titius-Bode dice así:
a = (n+4) / 10
Donde a es la distancia buscada expresada en unidades astronómicas (UA, distancia media de la Tierra al Sol, 147,6 millones de Km.) y n es un número gobernado por la secuencia

0  3  6  12  24  48  96  192  384  768...
Como se ve, cada número es el doble del anterior. Si, siguiendo la fórmula de la ley, sumamos 4 a cada número:
4  7  10  16  28  52  100  196  388  772...

Y luego los dividimos por 10, tendremos:

0,4  0,7  1  1,6  2,8  5,2  10  19,6  38,8  77,2...

Que en verdad define con increíble precisión la distancia de cada uno de los planetas al Sol expresada en UA.
La tabla siguiente muestra la asombrosa concordancia de la Ley de Titius-Bode con la realidad de nuestro sistema solar. Por supuesto que Plutón no se había descubierto a esas alturas, por lo que lo hemos agregado nosotros:

 Planeta         n                       Titius-Bode          Realidad

Mercurio       -                          0,4                        0,39

Venus            0                         0,7                        0,72

Tierra             1                          1                          1

Marte             2                          1,6                       1,52

--                   3                          2,8                       2,8

Júpiter            4                          5,2                       5,2

Saturno          5                         10                         9,54

Urano            6                         19,6                     19,2

Neptuno         -                            --                      30,1

Plutón            7                         38,8                     39,4


2. Todos han observado un eclipse de Sol total. ¿Han notado que los tamaños aparentes del Sol y la Luna son iguales? La explicación es simple pero intrigante. Desde la Tierra los tamaños aparentes del Sol y de la Luna son prácticamente iguales. En una proporción sorprendente, el Sol es 400 veces más grande que la Luna, pero está también 400 veces más distante. Una gran coincidencia Cósmica.




3. Para rematarla, una curiosidad estética. Los colores de los planetas exteriores, es decir, más allá de la Tierra, a partir de Marte forman un arco iris. Comenzando por el rojo de Marte, para terminar con el violeta de Plutón.
Puede decirse que se trata de meras coincidencias, pero como dijera el astrónomo de Munich, Alexander Wilkens, “La palabra coincidencia también tiene sus límites”...

¿Cómo se explica todo esto?... Coincidencias... Al parecer, “El Hacedor de Estrellas” tiene sentido del humor.
Pareciera que el sistema solar fue, hace miles de millones de años, manipulado artificialmente por fuerzas inteligentes e inconcebibles...
Comentario: Imposible...No hay.......

***** Las extrañas características del mundo en que existimos. Un Universo “a medida”.(1)

Física del Cosmos


1. Los átomos más pesados que forman nuestro cuerpo y los planetas, se han formado en el interior de las estrellas. No de manera continua, sino violentamente en explosiones gigantescas denominadas novas y supernovas. Si en este momento explotara una supernova, digamos a unos quinientos años luz de la Tierra, en quinientos años, cuando la onda energética de choque llegara hasta acá, barrería con toda la vida existente. Es decir, para que exista materia que pueda dar origen a la vida, se necesitan supernovas, pero no deben ser tan frecuentes que arrasen con toda la vida que pueda existir en mundos habitados.
Tienen que ocurrir dosificadamente... y ocurren de forma gradual.

2. Otro aspecto de lo extraño que es nuestro Universo lo constituyen las estrellas.

    Una estrella se forma por la interacción entre dos fuerzas: la gravitatoria, que aglutina el hidrógeno estelar, y la fuerza explosiva de la reacción en cadena – una bomba de hidrógeno – que se produce en su interior. El margen de valores que permiten que la estrella permanezca es muy estrecho. En un extremo se producen las gigantes azules y en el otro las enanas rojas que no permiten la aparición de vida. Por una rara coincidencia, las constantes fundamentales de la naturaleza lo hacen factible. Si, por ejemplo la fuerza gravitatoria difiriera en, digamos una parte en 10 elevado a 40, el equilibrio se alteraría y no existirían soles amarillos para permitir la vida. Y esa es una variación insignificante.

3. Los valores de las fuerzas fundamentales de la naturaleza. Son cuatro: la gravitatoria, la electromagnética, la nuclear fuerte y la fuerza nuclear débil. Si el valor de la fuerza nuclear fuerte, que mantiene unidos los protones en el núcleo fuera un poco menor, los átomos no se formarían jamás y si fuera un poco mas fuerte solo se formaría el átomo de hidrógeno… es decir, no existirían estrellas ni Universo.

4. El caso más sorprendente es el del agua.


Este líquido tiene propiedades increíbles. Para empezar, su composición química es simplísima. Dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. La mayor parte de los elementos o substancias se contraen al enfriarse y se expanden al calentarse. Sin embargo el agua hace algo muy extraño. Cuando se enfría al punto de congelación se expande y adquiere menor densidad que cuando estaba en estado líquido y eso le permite flotar. Otras substancias hacen lo contrario. Al pasar del estado líquido al sólido se hunden, se hacen más densos.
Si el agua se comportara así, no podría existir la vida. El fondo de los océanos estaría congelado y los océanos se congelarían por completo.
Además, la tensión superficial del agua, solo es superada por el selenio líquido. Esto permite que penetre por las grietas de las rocas. Al congelarse las rompe en pedazos. Si fuera menor esta tensión, no se podría formar el suelo en los planetas. Además, la viscosidad del agua es precisa. Si fuera mayor, no podrían existir los sistemas circulatorios en los seres vivos.

Comentario:  Todo este asunto está muy bien armado. Ver próxima entrada: El Sistema Solar ¿Ha sido intervenido?

***** Las extrañas características del mundo en que existimos.

Un Universo “a medida”